Parece que las personas infelices, aquellas que creen no tener una felicidad plena, no entienden por qué no son felices. Disfrutan de trabajos lucrativos, abundancia de cosas materiales, tienen relación con familia, amigos y conocidos e, incluso, son respetados; pero siguen siendo infelices. Usted mismo, si se encontrara en esta situación, se pregunta por qué vive una situación tan abrumadora. Tal vez usted se haya privado de probar eso que llamamos “una vida sencilla”; ¿podría esto hacerlo feliz? Usted puede decidir llevar una vida sencilla que conduzca a la felicidad. Elegir una vida sencilla puede ser la mejor decisión que usted pueda tomar; los beneficios son muchos, y le mostramos algunos en este artículo.
Mejora su salud. Una persona tiende a sentirse más feliz cuando disfruta de buena
salud, contrario al estrés de tener demasiados padecimientos que le hagan
perder el sueño, aunque sean cosas que parezcan sencillos como problemas
digestivos, insomnios, falta de apetito y otros males más como pasar el tiempo
trabajando solo para pagar deudas, sin poder darle prioridad a su salud y aumentando
la sensación de ansiedad. Todas estas situaciones conducen a una mala salud
impidiéndole ser feliz.
Disfruta de las cosas
pequeñas, pero maravillosas de la vida. La falta de
felicidad es producto de personas que llevan una vida agitada que no puede
disfrutar de tantas cosas bellas a su alrededor; usted debe dejar llevarse e ir
más despacio y disfrutar del mundo que lo rodea. Los placeres sencillos, como disfrutar
la naturaleza y todas sus bellezas aportan una felicidad verdadera a nuestras
vidas.
Le genera
agradecimiento. Si se deshace de la basura y desorden
mental que solemos tener, esto le permitirá ir más despacio y centrarse en sus necesidades
reales y prioridades y pronto encontrará esas cosas por las que debe estar
agradecido, como una buena salud. La gratitud proporciona un camino hacia la
felicidad.
Logra mayor
conexión con su familia y amigos. Nos necesitamos unos
a otros, necesitamos de las personas, como seres sociales que somos. Cuando lleva
una vida agitada, de actividad en actividad y preocupación en preocupación no tiene
tiempo para ocuparse de sus relaciones con familia y amigos, se desconecta y
sus relaciones se ven gravemente afectadas. Simplificar su vida le permite
pasar más tiempo con sus seres queridos y profundizar sus relaciones, esto lo
hace sentir satisfecho y más feliz.
Trabajando
menos, logra satisfacer sus necesidades básicas. Una
vida sencilla lo lleva por nuevos caminos, descubriendo sus necesidades reales.
Puede aprender que usted puede vivir con mucho menos, manteniendo siempre una
vida de satisfacción y elegir un trabajo menos estresante. No se trata de
retroceder en el éxito, sino de simplificar su vida cuando ésta parece estar
complicada y privándolo de la felicidad que usted merece; la felicidad no tiene
por qué eludirlo y si lo que se la está quitando es la complicación de su vida
elija una vida más sencilla; dese la oportunidad de ser feliz y vivir su vida
al máximo.